El Comienzo de una Nueva Era de Videoconferencia

06/02/2014 - Blog

Autor: Bob Romano, Vicepresidente de Marketing Global de Radvision

¿Cuál es el futuro de la vídeo colaboración? Puedo resumirlo rápidamente: el crecimiento exponencial de la cantidad de personas y la cantidad de lugares desde donde las personas colaborarán por medio del vídeo. Estamos en el comienzo de una gran era en la vídeo colaboración con base en Internet. La consumerización de IT, la popularidad de los dispositivos y las aplicaciones móviles de consumo en los últimos años han revitalizado el estancado mercado empresarial móvil. Del mismo modo, la popularidad de los teléfonos inteligentes y las tabletas económicas y potentes, junto con aplicaciones como FaceTime, Skype y GoogleTalk, no sólo pusieron el vídeo chat a disposición de las masas, sino que también está impulsando la demanda de video empresarial de alta calidad en el lugar de trabajo. “La videoconferencia se está convirtiendo en la tendencia principal del uso empresarial a nivel personal (móvil), no al nivel de la telepresencia o del sistema basado en sala”, declaró Andrew Davis, analista de WainhouseResearch. Entonces, vemos que muchas más escuelas y universidades utilizan el vídeo para llevar a cabo la educación a distancia o la formación de docentes de una manera más colaborativa. Los socorristas pueden utilizar sus teléfonos inteligentes para ver lo que está sucediendo en el lugar de la emergencia. Los médicos en toda la ciudad o en todo el país pueden compartir vídeos y registros y colaborar para realizar mejores tratamientos, todo a través de conexiones altamente seguras. Los medios bidireccionales, como el vídeo, se benefician del “efecto de red”: cuanto más dispositivos y terminales haya conectados, más útil será para todos. Eso está haciendo que más personas se interesen en el vídeo, alimentando una espiral de respuestas. Equipados con computadoras portátiles y dispositivos móviles, estos nuevos usuarios exigen que el vídeo empresarial sea tan cómodo y ágil como su homólogo de uso personal.

Aprendiendo por observación

Somos criaturas inherentemente visuales. Sí, el mundo empresarial ofrece un menú muy variado de herramientas de colaboración, que incluye teléfonos, correo electrónico, mensajes instantáneos, presentaciones en vivo o pre grabadas e incluso escritorios compartidos. Todo esto es bueno, necesario y poderoso. Pero apenas encienda un televisor en la esquina de una sala de reuniones llena, los ojos de todas las personas se sentirán irresistiblemente atraídos por la pantalla en vivo. Según Forrester Research, la utilidad del vídeo surge de su capacidad de “reproducir las interacciones y comunicaciones cara a cara, conversar en tiempo real y observar las reacciones de los demás sin importar dónde se encuentre. El vídeo ayuda a poner un rostro y gestos particulares a un nombre y una voz, lo cual les permite a los equipos remotos y esparcidos sentirse más conectados y comprometidos con los objetivos compartidos”. Si se hace bien, la colaboración por vídeo también puede ahorrarles dinero a las empresas (piense en lo que se ahorraría en viajes) y, al mismo tiempo, aumentar las ventas y mantener contentos a los clientes. Todo eso sucede en la actualidad. Pero, como mencioné anteriormente, la colaboración por vídeo se está transformando para volverse más simple y más abierta. Tiene que serlo. Para mediados del próximo año, se espera que la cantidad de teléfonos inteligentes y tabletas que se utilizarán en todo el mundo supere los 1.5 billones de computadoras. Estos dispositivos son cohetes en nuestros bolsillos. Según Jon Peddie Research, para 2015, el 80% de los teléfonos inteligentes tendrán cámaras y pantallas tridimensionales con sonido estéreo, las cuales mejoran el vídeo chat. Las políticas empresariales como “traiga su propio dispositivo” (BYOD) también se han convertido en algo corriente. Según una encuesta publicada en 2012 por la revista CIO, entre los próximos 12 y 18 meses, más de la mitad de las empresas (52%), planean alentará a los empleados a que traigan sus propios dispositivos e inclusive a exigirles que lo hagan. BYOD es una gran ayuda para el crecimiento del vídeo empresarial; por eso, las empresas deben adoptar esta política, no ignorarla. Ya no se trata de conectarse sólo con aquellas personas que tienen software aprobado de antemano e instalado en un escritorio empresarial o en una tableta. Se trata de conectarse con cualquier persona, en cualquier lugar a gracias a la rica comunicación que sólo el vídeo puede proporcionar.